Distracción «ejemplar»

Distraída, en la mesa una cerveza fresca para mitigar el calor que invadía su cuerpo. Sus pensamientos volaban más allá de lo que su vista alcanzaba a ver desde la terraza orientada al mar. Algo, mejor dicho, alguien llamó su atención. Metro noventa, andares seguros, media melena de color castaño claro perfectamente despeinada, barba de pocos días, tejanos de marca que a su vez marcaban una perfecta W delantera bastante abultada. Que bien le sentaban los putos tejanos. Cinturón de gran hebilla, donde se podía leer “Diesel”, engarzada en cuero de color marrón que llevaba la huella de guerras triunfales ¿Cuántas ávidas manos femeninas habían logrado darle la apariencia desgastada al jodido cinturón?… Una camiseta gris de manga corta ahogaba sus perfectos y nada exagerados bíceps ¿En qué parte de su cuerpo llevaría escondido el tatuaje? Un chaleco gris oscuro desabrochado completaba la maldita ropa que tapaba aquel cuerpo.

Sus ojos lo siguieron. El tejano aún le sentaba mejor por detrás. Él giró la cabeza, la miró, le dedicó una sonrisa de medio lado y le guiñó un ojo. El trago de cerveza no fue suficiente para apagar el calor que sintió en aquel momento, eso solo hubiese sido posible tirándosela por la cabeza a modo de ducha fría.

Una moto impresionante fue el destino final de aquel ejemplar con pinta de duro. La puso en marcha, dio la vuelta y… sabía que volvería a verlo.