Ha nacido una nueva… habitación
Hace un tiempo escribí sobre los “por si acaso” que metemos en la maleta, llegando a la conclusión de que la mitad de la ropa que llevamos de viaje sobra y vuelve a casa con los mismos pliegues que le hicimos para meterla en la maleta, eso sí, bastante más arrugada.
Bien, pues he llegado a otra conclusión, pero esta vez “a gran escala”. Igual que metemos cosas inútiles en la maleta ¿Nunca os habéis parado a pensar la cantidad de cosas inútiles y cosas “por si acaso” que llegamos a acumular en casa? Yo particularmente no suelo acumular, pero estoy segura de que aún así tengo cantidad de cosas que me sobran, y que desde el fantástico día en que las compré o me las regalaron, no han salido del armario (uy, suena raro eso de salir del armario), bueno, no han salido del armario de la habitación (ropa), no han salido del armario de la cocina (cacharrería mil para cocinar), no han salido del cajón o incluso, no han sido sacadas de su lindo envoltorio o todavía les cuelga la etiqueta de la manga.
Te compras unas camisetas de deporte para renovar vestuario deportivo, pero, cuando llega la hora de hacer el cambio, piensas “va no tiraré las viejas por si acaso algún día me da por ponérmelas, que son chulas”. Sí, son monísimas pero entonces ¡PARA QUÉ COÑO TE HAS COMPRADO LAS NUEVAS! Y ahí se quedan las viejas y las nuevas. Que evidentemente te pones la nuevas y las viejas acaban abajo del todo del montón, sí, pero ahí están. Quien dice ropa deportiva, dice ropa de diario, zapatos, ropa interior y un laaaargo etc. etc.
Hoy os dejo que penséis y analicéis bien la cantidad de esas cosas viejas, pasadas de moda e inútiles que tenéis en vuestra casa. Haced un inventario y seguro que llenáis más de un folio. ¡Qué digo! ¡Y más de diez folios también!
A partir de ahora, así como tenéis en casa, comedor, cocina, baños, dormitorios, ahora os propongo que habilitéis también una habitación exclusiva que la podéis bautizar con el nombre de “La habitación de los por si acaso”.
¡Ah! Y por favor, este fin de semana id a vuestro jodido trastero y empezad a tirar cosas. No os sigáis engañando. Nunca, nunca las vais a utilizar.