Mamá
A ella, que siempre ha estado a mi lado, que siempre me ha dado un abrazo y me ha dado la mano cuando lo he necesitado y cuando aún lo necesito. Porque, aunque ahora yo también soy madre, para ella siempre seguiré siendo hija. Sigue riñéndome cuando cree que no hago algo bien, sigue dándome algún que otro sermón, pero… sigue a mi lado.
A ella hoy quiero agradecerle ser para mi la persona más importante del mundo y agradecerle que me haya dado la vida, que me haya educado, que me haya enseñado a ser buena persona y en definitiva… que me haya enseñado a ser como ella.
Para ti mama, y por favor nunca me sueltes de la mano.
Te quiero.